Mostrando entradas con la etiqueta Jaime M.. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Jaime M.. Mostrar todas las entradas

domingo, 31 de marzo de 2013

Prejuicios

Prejuicios:

El otro día en clase de Filosofía, Don Jesús sacó a colación el tema de los prejuicios. Después empecé a darle vueltas al asunto y llegué a la conclusión de que nos dejamos guiar por prejuicios mucho más de lo que creemos. Encontramos infinitud de ejemplos en la vida real. Si te desaparece un libro tras la clase de inglés, ¿no piensas automáticamente en unos cuantos niños que son los "malotes"? Además, hay que distinguir otra clase de prejuicios, los "falsos prejuicios". Estos son aquellos que no tienen ninguna base ni fundamento, del estilo de: "Este profesor es un vago porque tarda un mes en corregir los exámenes, seguro que llega a su casa y no hace nada" Sin embargo, tú sabes que probablemente el profesor tenga que hacer muchas otras cosas y que por eso deberías ser más comprensivo.


Sin embargo, estos prejuicios se están viendo derrocados por el que hoy en día es el prejuicio por excelencia. De hecho, voy a dedicar esta entrada al "Rey de los prejuicios". Como la mentalidad de la sociedad ha cambiado, también lo han hecho sus prejuicios. ¿En qué ha cambiado nuestra mentalidad? Exacto, pragmatismo e individualismo. Como yo soy el más importante, comparo la conducta del resto con la mía. Es el famoso argumento de: "seguro que lo ha hecho, yo habría hecho lo mismo". Este prejuicio se ilustra a la perfección con el refrán popular: "Ladrón piensa que todos son de su condición". Por consiguiente, este prejuicio es mayor cuanto menores son las trabas morales del sujeto. Por lo tanto, en la medida en que eliminemos los prejuicios de nuestra vida, mejoraremos como personas. Por una sociedad sin prejuicios.

Jaime M.

¡Gracias!

¡Gracias!:

Son muchas las semanas que llevamos con el blog, y las expectativas que yo tenía respecto a éste se han visto gratamente superadas. Al principio, cuando nos contaron que teníamos que hacer un blog la gente no se lo tomó en serio. Cuando nos contaron que realmente contaba para la nota, los estudiantes lo vimos como eso, una forma de subir la media en la asignatura de Filosofía. Los profesores, cuando se les preguntaba para qué servía un blog respondían que para "mejorar la expresión", algo que ha quedado comprobado.

Sin embargo, el tomar parte activa en el blog me ha hecho ver otros beneficios. En primer lugar, te permite ver lo que tus compañeros piensan, además de ver el estilo con el que escriben y hacerte una idea acerca de su orientación ideolóliga. En segundo lugar, te permite estar informado y descubrir información interesante, ya sea de actualidad, cultura general... Por último, y en mi opinión, la más importante, te ayuda a tener las cosas claras y a formar ideas propias. El hecho de sentarte frente al ordenador y ponerte a pensar acerca de un tema hace que seas tú el que piese, lo que te ayuda a tener ideas propias y no repetir como un loro lo que has oído decir a tus padres o amigos. Ésto es, con diferencia, lo que más agradezco del blog. Me he dado cuenta de que ha sido tan beneficioso que estoy planteándome seguir escribiendo en el blog. Por eso animo a que se siga practicando esta brillante iniciativa en los cursos venideros. ¡Gracias!

Jaime M.

sábado, 30 de marzo de 2013

¿Cómo valoramos a la gente?

¿Cómo valoramos a la gente?:

¿Cómo valoras a la gente? Hoy en día valoramos a la gente por lo que significa para nosotros. "PARA NOSOTROS". ¿Te das cuenta no? Hemos llegado a un punto en el que la sociedad es tan práctica, tan pragmática que cuando pensamos en alguien no lo vemos como lo que es, sino como lo que significa para nosotros. De esta forma sólo es "relevante" alguien si nos puede ser de alguna utilidad o si nos une algún lazo afectivo a él. Os voy a poner un ejemplo: imaginaos que un amigo de otra clase te pregunta que tal es tu profesor de filosofía, y te acaba de dar un 10 en un examen (no sé si tendréis tanta imaginación) ¿Qué responderás? "Es un tío fantástico, hace las clases interesantísimas...." Ahora imaginad que habéis sacado un 1 en el examen. ¿Será la misma la respuesta? Evidentemente no. "Hace las clases aburridísimas, siempre deja las frases a medias...."
Sin embargo, nuestra concepción de cómo "es" el profesor debería ser la misma me den un 10 o un 1. La solución a este problema es fácil, o al menos en teoría: pensar más en los demás. ¿Cómo se logra esto? Fácil. Pensando menos en mí.


Jaime M.

Si no se vive en presente, no se vive

Si no se vive en presente, no se vive:

Imagínate que hoy mismo te murieses, lo cual es muy poco probable, pero tampoco sería descabellado. Hazte una pregunta: ¿He hecho todo lo que quiero? ¿He vivido todo lo que yo he querido y como yo he querido? En la inmensa mayoría de los casos la respuesta será la misma: para nada. Esto es debido a que hoy en día el hombre no vive en presente, sino en futuro. El ejemplo más claro de esta conducta es el de algunas personas, los "ahorradores", que acumulan más y más dinero para usarlo en un hipotético futuro, y se dan cuenta de que deberían haber "hecho esto" o "comprado aquello" cuando ya es demasiado tarde.

Por otro lado, ¿quién no ha oido expresiones como "esto con Franco no pasaba" o "ya no hacen películas como las de antes"? Este es el otro error que cometemos, vivir en pasado. Nos anclamos en los recuerdos de una época que consideramos mejor, sin darnos cuenta de que el presente es el mejor regalo que nos pueden hacer. En este sentido, es indispensable vivir el momento, "carpe diem", porque al final lo bueno de la vida se resume en un conjunto de buenos momentos. Si aprovechas cada segundo como si fuese el último, cuando realmente éste llegue estarás orgulloso de lo que has vivido, porque "habrás vivido"

Jaime M.

martes, 19 de marzo de 2013

¿Justicia injusta?

¿Justicia injusta?:

Mucha gente tiene una fe ciega en la justicia, y no se da cuenta de que ésta está muy influenciada por prejuicios, política, y de que tiene fallos. No estoy diciendo que la justicia de este país esté comprada, ni que sea un desastre. Sólo digo que aún queda mucho que mejorar. Os voy a poner un ejemplo. Iñaki de Juana Chaos, un conocido terrorista, fue detenido e imputado por cometer y participar en 25 asesinatos. Tras el juicio, fue condenado a 3.000 años de cárcel, los cuales, siguiendo la legislación vigente, se tradujeron en que cumplió tan sólo 18 años, a pesar de no mostrar signo de arrepentimiento alguno. Otro nombre que quizá os suene es el de Miguel Montes Neiro, conocido más comúnmente como "el preso más antiguo de España". Este hombre ha cumplido 36 años en prisión (el doble que de Juana Chaos) por robos, algunos con el agravante de violencia, pero ningún delito de sangre.
No sé a vosotros, pero a mí esto me parece que da bastante que pensar. ¿Un vulgar ladrón que cumple el doble de condena que un asesino que ni siquiera se arrepiente de sus actos? Creo que no me equivoco si digo que algunos aspectos de la justicia de este país dejan mucho que desear. Con esta entrada quiero hacer ver que hay ciertos aspectos de nuestra legislación que deben ser reformados, puesto que a algunos criminales sus actos les salen muy baratos. ¿Te parecen justos 18 años por matar a 25 personas y arruinar la vida a 25 familias? No sé a ti, pero a mí no.


Jaime. M

viernes, 15 de marzo de 2013

La deshumanización del hombre

La deshumanización del hombre:

La tendencia del hombre al pragmatismo y el individualismo tiene una única e inevitable consecuencia: la codicia. Ésta se ha arraigado en nuestras almas, levantando muros de rencor, odio y envidia. Como consecuencia, hemos tomado el camino equivocado. La tecnología, desarrollada para conseguir un mundo más justo, ha creado desigualdades económicas, sociales, culturales... ¿Qué hay de justo en eso? La ciencia, que tenía como objetivo un mayor conocimiento del mundo, no ha hecho sino acrecentar nuestra prepotencia y nuestro cinismo, hasta el punto de creernos Dios. Y lo peor es que no nos damos cuenta.


Conceptos como el bien común, la generosidad o el altruismo son rechazados en un mundo en el que solo importo yo y en el que todo, absolutamente todo, tiene un precio, donde nadie hace nada sin esperar nada a cambio. Hemos empezado a erradicar estas emociones de nuestra vida, sin darnos cuenta de que son precisamente éstas las que nos hacen ser lo que somos: humanos. Hasta que no recordemos lo que realmente somos, y por qué lo somos, la sociedad seguirá deshumanizándose poco a poco. Hemos empezado a pensar, pero el precio ha sido dejar de sentir. Nos hemos convertido en esclavos de nosotros mismos.


Jaime. M

domingo, 10 de marzo de 2013

Cámbiate a tí mismo

Cámbiate a tí mismo:

Esta entrada va dirigida a aquellas personas que se indignan ante las maldades y las injustancias que otros cometen. Tú, que te indignas cuando un político es condenado por fraude, ¿no eres el primero que copia en un examen si tiene la oportunidad? Tú, que te enfadas cuando alguien soborna, ¿no eres el primero que va en metro sin pagar? Con estos ejemplos no quiero decir que tus "delitos" sean iguales (al contrario, no tienen nada que ver) sino que una cosa lleva a la otra. ¿Crees que el ladrón de joyas empezó directamente? Claro que no, empezaría robando paquetes de chicles, luego camisetas y más tarde videojuegos, hasta pasar a joyerías o viviendas particulares.

A lo mejor el que copies en un examen te parece una tontería, pero esa tontería puede condicionar tu futuro. Aquellos que se quejan de corrupción, si no desarrollan la honradez y la integridad desde niños, caerán también. Acabo con una de las frases más ciertas que he oído nunca. "Todo el mundo piensa en cambiar la humanidad, pero nadie piensa en cambiarse a sí mismo". Guerra y Paz (Tolstói)


Jaime. M

La sociedad del miedo

La sociedad del miedo:

Vivimos en una sociedad que lo racionaliza todo, y cuando algo no se puede racionalizar, sencillamente lo rechaza. Y no hay nada más irracional que el miedo. De modo que ante lo desconocido, como no se puede racionalizar, desarrollamos miedo. De esta forma hacemos del temor un hábito. Tememos la muerte, el pasado, el futuro, el fracaso... Sin embargo, vivimos en una sociedad que tiene como pilares básicos el individualismo y el pragmatismo, una sociedad en la que el miedo no tiene cabida porque no me reporta ningún beneficio, al contrario. Por lo tanto, desarrollamos una conducta de rechazo al miedo, y por consiguiente rechazamos la muerte, el fracaso...etc.

Intentamos ignorarlo a pesar de que está ahí, latente en nuestro interior, y cuanto más tratamos de ignorarlo más irracional se vuelve, y por tanto, nuestro miedo crece, al tiempo que nos encerramos en nosotros mismos, en una utopía en la que el miedo no existe, en vez de hacer frente a nuestros verdaderos temores. Afrontar un miedo es la única forma de superarlo, pero nosotros vivimos en un mundo en el que lo ignoramos pensando que así eliminamos el problema de raíz, y no es así. En verdad os digo que el miedo es la mayor herramienta de esclavitud y sometimiento, por lo que sólo quien acepte sus miedos será libre.


Jaime.M



¿Qué es la poesía?

¿Qué es la poesía?:

Os habréis dado cuenta de que algunos hemos subido alguna entrada en forma de poesía. Pero...¿A qué llamamos poesía? ¿Cómo se hace poesía? ¿Es un puzzle de rimas, algo que suena bien....? Poesía es eso y mucho, mucho más. Decir que la poesía son sólo rimas es como decir que un equipo de fútbol es tan solo un grupo de jugadores, o que un sentimiento es una serie de impulsos químicos. Nosotros valoramos la poesía por lo que nos hace sentir. Ahí lo dejo.


La poesía es belleza,
amar la naturaleza,
hacer caso al corazón
ignorando a la cabeza,
un instante de pasión,
un segundo de inspiración,
es tener una certeza,
es vivir una canción.

La poesía es un sueño,
esforzarse con empeño,
algo que jamás se olvida
evitar fruncir el ceño,
una cosa divertida,
resistir cualquier herida,
es poder sentirte dueño
de tu estilo de vida.


La poesía es un momento
cargado de sentimiento,
es un bello amanecer,
es ver a alguien contento,
es volver a nacer,
no tener nada que perder
y morir en el intento:
es lo que me gusta hacer.

Jaime. M





sábado, 9 de marzo de 2013

Una entrada rimada, una entrada publicada

Una entrada rimada, una entrada publicada:

Estaba haciendo una entrada
con inmensa dedicación,
cuando viéndola acabada
vino a mí la inspiración.


Quise plasmar lo que pienso,
una idea y una venía,
un deseo tan intenso
que se vuelve esquizofrenia.


La obsesión que me consume
transformada en poesía,
la realidad que se asume:
aprobaré filosofía.


Lo que sí que me deprime
es ponerle en un dilema
pues sería todo un crimen
ignorar este poema.


Así comienzo mi andanza,
con una entrada rimada,
transformando esa esperanza
en una entrada publicada.



Jaime M.

miércoles, 6 de febrero de 2013

La elección de tu vida

La elección de tu vida.:

Cuando hace unos días fui a la convivencia era una persona totalmente distinta a la que ahora soy. Y sin embargo, sigo siendo yo mismo. Esa semana me marcó como un hierro al rojo marca al ganado, pero si hubo algo que dejó una huella indeleble en mí, ese algo fue la visita al IESE. Algunos estaréis pensando algo así como: ya está el pelota este que no se le ocurre otra cosa para subir nota... Nada más lejos de la realidad. Voy a abriros mi pequeño corazoncito. Lo que más temo, por encima de la muerte, de profesores de música locos o de asesinos en serie es equivocarme. Sí, equivocarme. Algunos tienen pesadillas con invasiones zombies, y otros las tenemos con elecciones equivocadas. ( ¿Da que pensar, eh?).


Por eso podéis imaginar mi sorpresa cuando la ponente del IESE me sacó de mi particular pesadilla sobre una elección (no diré cuál, sólo que acababa muy mal) gritando: ¡Tenéis que elegir! Tuve que contenerme para no levantarme y gritar ¡NO LO HAGÁIS, ES UNA TRAMPA! Pero el miedo a hacer el ridículo me contuvo, y seguí escuchando. Al final de la mañana ya no me daba miedo elegir, es más, ¡quería elegir! Al fin he comprendido que lo que de verdad merece la pena es por lo que estás dispuesto a arriesgarte y, aunque eres esclavo de las decisiones que tomas, también lo eres de las que no tomas. Cuando sea mayor no querré recordar mi vida por lo que me arrepienta de no haber hecho, sino por lo que esté orgulloso de haber hecho. Os lo aseguro, no querréis vivir toda una vida preguntandoos: ¿Y SI....?

Jaime. M